Si no se cuidan las cutículas a diario con un producto específico, estas tienden a endurecerse, agrietarse y convertirse en una pequeña piel molesta. Provoca un aspecto descuidado a las uñas, y las manos pierden su atractivo.
La crema para cutículas mantiene las cutículas flexibles. Suaviza la piel de alrededor de la uña permitiendo que esta se desprenda y podamos retirarla suavemente hacia atrás. Proporciona un contorno de uñas bien cuidado. No estropea la manicura.